Puzzle

Decían algunos filósofos que cuando nos enamoramos es porque la persona escogida cumple una serie de requisitos que nosotros ya teníamos en nuestra memoria. Es decir, nuestras vivencias desde pequeños nos hacen imaginar a una persona “ideal”. Un poco de nuestro primer amor, un poco de la comprensión de nuestra madre, un poco de esa profesora que tanto nos gustaba…Y quien más coincide en nuestro puzzle, es la persona de la que nos enamoramos. Después llegaron los científicos y aplastaron esas teorías. La sensación de enamoramiento es pura química, dicen. Parece ser que una sustancia que segrega nuestro cerebro, nos produce esa sensación tan extraña que mezcla dependencia y pasión.
Explico esto porque me parece que con la música nos pasa algo parecido a lo que contaban los filósofos. Creo que desde pequeños memorizamos una serie de melodías, de voces, de canciones…y a partir de ahí nos vamos dejando enamorar por la música que más coincide con estos patrones. Los científicos aplastaran también mis teorías, lo se, pero esta es, simplemente, la explicación romántica del asunto, aunque todo esté en el cerebro.